Existen escenarios donde individuos toman decisiones de importancia en las cuales no tienen con quien analizar, sopesar, reflexionar o compartir las mismas. Entre estos se encuentran ejecutivos de alto nivel, empresarios (dueños), y una familiar con las cual nos podemos identificar, la de los coaches. A veces surgen situaciones donde no vemos el progreso deseado con nuestros clientes; se presentan dudas en la aplicación de estrategias / metodologías, procesos; retos en nuestra relación con el cliente / patrocinador; inseguridad dentro de nuestro propio ser en cuanto a nuestra capacidad, conocimiento, crecimiento profesional y muchas otras incertidumbres que el lector puede pensar. Existen recursos a los cuales podemos dirigirnos en búsqueda de respuestas / iluminación, tales como: seminarios (presenciales / web), talleres y la lectura de libros especializados en coaching. Todos tienen sus bondades / detractores, pero en general son visiones generalizadas que pueden o no ser incisivos en la resolución del reto que enfrentamos. En este artículo te presento una alternativa que es enfocada a tu realidad: particular- La Supervisión de coaching, mejor dicho: La Super Visión* de Coaching. Más adelante explico por qué se hace la distinción.
La Super Visión* de Coaching ha tenido su génesis como parte del desarrollo de la práctica profesional del Coaching. Esta ha cobrado mayor relevancia tanto en Estados Unidos EE. UU. como en Latinoamérica. En Europa y en Australia ésta práctica está mucho más enraizada y tanto el Consejo Europeo de Mentoring y Coaching (EMCC) como la Asociación De Coaching (AC) la proponen en su código de ética global como requisito obligatorio sin el cual no se puede progresar en el recibo y conservación de acreditaciones. Mientras, la Federación Internacional de Coaching (ICF), organización a la cual la mayoría de los coaches en Puerto Rico están afiliados, establece que la Supervisión es una práctica que puede ser elegida para acreditar las horas de educación continua que son necesarias para conservar las credenciales que la entidad otorga.
La EMCC define la Supervisión de Coaching como- “la interacción que ocurre cuando el coach comparte con el supervisor sus experiencias de trabajo, para recibir apoyo y establecer un diálogo reflexivo y un aprendizaje colaborativo que beneficie tanto al coach como a sus clientes y a las organizaciones que pertenecen”. Se hace hincapié en el aspecto colaborativo del proceso. El procedimiento involucra a colegas que tienen un código profesional común y entablan un intercambio que busca el crecimiento del coach y también enriquece al supervisor. La Super Visión* no es un proceso de control, crítica ni juicio,; como desafortunadamente se pudiera inferir por la nomenclatura utilizada. En realidad, es un proceso en el cual el supervisado y el supervisor, toman distancia y se elevan para tener mejor visión de lo que sucede en la interacción entre coach / cliente y el supervisado / supervisor. Por eso se considera más apropiadao la nomenclatura de la “Super Visión*” y no la “Supervisión.” A diferencia de lo que sucede en el Coaching, la Super Visión* tiene el objetivo claro de: reflexionar sobre la tarea que desarrolla el coach y aumentar su efectividad a partir de explorar no solo lo que hizo sino también el “quién” del coach, sus emociones, sus creencias, sus bloqueos y sus puntos ciegos. Además, s Se indaga acerca de las posibles dificultades o desafíos que encuentra el coach al trabajar con sus clientes, como maneja sus propias emociones y dilemas éticos. Durante el trabajo de Super Visión*, la exploración de la relación que se da tanto entre el coach / cliente como entre el coach / supervisor son clave para el aprendizaje y el crecimiento de todas las partes involucradas. Se opera en el beneficio del coach, de sus clientes y de los sistemas en que cada cual son partes y de la práctica profesional del Coaching.